Un viaje educativo en Limburg que debía terminar el 18 de marzo pasado para diez estudiantes del colegio Alemán de Guayaquil se ha prolongado inesperadamente. Desesperados ante el cierre de fronteras en otros países, padres de familia intentan obtener apoyo de las autoridades ecuatorianas para tratar de sacar de esa ciudad alemana a los jóvenes.
El grupo colegial quedó imposibilitado de salir de Alemania por la suspensión de vuelos del exterior que dispuso el Gobierno de Ecuador. El último ingreso de ecuatorianos se permitió el lunes pasado y los estudiantes no alcanzaron a adelantar el regreso.
Contentos y sin sospechar del rápido avance del coronavirus que ha obligado a los países a cerrar sus fronteras, los estudiantes salieron de Guayaquil el 9 de febrero pasado.
Viajaron para realizar un ciclo de estudios del idioma alemán y tenían boletos de retorno a través de Iberia. Ellos están hospedados en un departamento bajo el cuidado de una pareja.
Sebastián Beccaglia, padre de familia, cuenta que la aerolínea Iberia les canceló el vuelo ante las medidas adoptadas en Ecuador. Una esperanza se abrió cuando KLM anunció vuelos excepcionales a Ecuador para venir a recoger europeos.
“Compramos (boletos) en KLM para el domingo (ayer), que costó mucho, y a última hora lo cancelaron por lo ocurrido en el aeropuerto de Guayaquil”, cuenta Beccaglia.
Aunque han tenido contacto con funcionarios de la delegación diplomática en Alemania, aún no hallan una solución para repatriar a los chicos, que ya anhelan volver a Guayaquil ante la situación.
El caso de estos adolescentes varados es similar a otro grupo de diez estudiantes y una maestra del colegio Logos, imposibilitados de salir de Londres. Ellos están en Reino Unido desde el 29 de febrero por un programa educativo.
Intentaron volver a Ecuador en un vuelo de KLM que iba a pasar por Colombia, pero ante el cierre de frontera para los extranjeros en ese país los regresaron a Londres. Después consiguieron un salvoconducto para ingresarlos a Ecuador, pero luego eso fue revocado.
Un suplicio por regresar también viven otros grupos de ecuatorianos que por turismo o estudios de maestrías se quedaron varados en Estados Unidos, México, Panamá, Argentina, Perú y otros países.
Unos reclaman que así como otras naciones están permitiendo vuelos excepcionales para repatriar a sus connacionales se haga en Ecuador. Junior Mera, uno de los pasajeros atrapados en Cancún, indica que en ese balneario mexicano hay ecuatorianos desesperados porque les cancelaron vuelos. Algunos pernoctan en el aeropuerto de esa ciudad.
En sitios turísticos de Perú hay más casos. Carlos Analuisa, quien está en Cusco, dice que tenía un boleto de retorno para el 25 de marzo, pero cuando se enteró de que Ecuador suspendía los vuelos intentó cambiarlo. “Nos estaban cobrando la aerolínea $1500 para retornar y no teníamos”, dice.
Ante la falta de recursos señala que está alojado, con otros ecuatorianos, en un cuarto que el dueño de un hostal habilitó para ayudar a turistas varados.
Andy Morales, otro ecuatoriano varado en Perú, dice que se han contactado con las autoridades ecuatorianas en ese país, pero no les dan una alternativa para regresar. (I)
Nota que escribí para EL UNIVERSO.
Nota que escribí para EL UNIVERSO.
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