Los arcos de agua en dos gestas deportivas históricas de Ecuador

Ecuador nunca se había bañado de gloria en un mismo mes, con dos deportes diferentes. Por eso junio del 2019 será histórico. El triunfo del ciclista Richard Carapaz en el Giro de Italia y, días después, el tercer lugar de la selección sub-20 en el Mundial de Polonia, pusieron en el podio al país.

Las gestas deportivas no pasaron desapercibidas en el país y los protagonistas fueron recibidos con honores y vítores. El aeropuerto de Quito, ubicado en Tababela,  fue el primero en rendir tributo  en la llegada de los deportistas, recibiendo con 'arcos de agua' a los aviones que los trajeron.

El arco de agua es un ritual que generalmente se lo usa para ocasiones especiales dentro de la aviación, como recibir un nuevo vuelo, la despedida de un avión, el retiro de un piloto o para dar la bienvenida a personajes importantes. En el 2010, el vuelo de Alitalia que trajo al Papa Francisco fue recibido en Quito con la lluvia de agua.

El 10 de junio pasado, el vuelo de Iberia que trajo a Carapaz de Madrid a Quito fue recibido con agua mientras rodaba. Dos carros motobombas de los bomberos aeronáuticos bañaron con agua la aeronave. Las propulsiones se hacen hacia arriba y eso da una forma a un arco. 

Los orígenes de este ritual se asocian a un gesto de buen augurio o suerte. Hay aerolíneas que dan cuenta de este ritual desde hace más de dos décadas, especialmente cuando recibían un nuevo avión. En algunas naciones se maneja el término cortinas de agua. 

El domingo 16 de junio, el vuelo de KLM que trajo a la Mini Tri fue recibido también en la capital ecuatoriana con arcos de agua. Desde la cabina del avión se flameó una bandera de Ecuador. Los chicos fueron recibidos como héroes por el bronce logrado en un mundial. 

Fotos: @ServiAeroQuito 

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